De Inma, mujeres imperfectas, realidad e hipocresía

Keira Knightley, sin «aumentos» para la revista Interview

Sí, ya sé que esto que pone el título no tiene que ver con alimentación ¿o sí? En cualquier caso, el blog es mío y hablo de lo que quiero. O eso me he dicho mientras pensaba si hacer una entrada sobre el tema o no. En realidad ya he hablado de cosas similares otras veces, por ejemplo aquí comentando el mensaje que la industria alimentaria lanza sobre las mujeres o aquí sobre la moda de las modelos «curvy».

Hoy leíamos la queja que colgaba en su Instagram la actriz Inma Cuesta por el retoque de una foto suya que ha sido portada del suplemento dominical de El Periódico, ha sido uno de los temas del día tanto en redes sociales como en el resto de la prensa nacional. Inma ha protestado por los retoques injustificados a los que ha sido sometida la foto, que incluyen reducir su cadera, estirarle el cuello, estilizar su brazo, cortarle la coleta y alisar su piel. Ella afirma no reconocerse en la foto y avergonzarse del resultado. Su queja ha sido aplaudidísima, incluso por compañeras suyas de profesión que reconocían en redes no haber tenido valor para protestar cuando les había pasado lo mismo. 

Aunque según El País, Inma es la primera actriz española en quejarse de los retoques, a nivel internacional otras actrices ya lo habían hecho, como es el caso deKate Winslet por quitarle años y kilos, Keira Knightley por aumentarle el pecho o Cate Blanchet por eliminarle lineas de expresión. He buscado a ver si había algún hombre famoso que se hubiera quejado públicamente de lo mismo, pero no he encontrado nada ¿os suena a vosotros alguno? en cualquier caso parece que se aplica el retoque con mucha más saña en mujeres, especialmente a nivel «recortar carne» de piernas, brazos, y tronco y aumentarla en tetas como se queja Keira, y en quitar arrugas. Lo de igualar el tono de piel y eliminar imperfecciones si que creo que debe ser más unisex. Hablo desde el desconocimiento, que quede claro.

Kate Winslet en realidad y en la portada de GQ. Foto de Beautyredefined.

Bien, hasta aquí la introducción. Olé por Inma. Y por todas ellas. Vaya por delante. Pero somos unos hipócritas, y me incluyo. Es muy políticamente correcto alabar la «naturalidad», las «mujeres reales» (lo que coño sea que entendemos por ello), criticar los «cánones de belleza» y colgar y compartir en facebook imágenes motivadoras que dicen que lo que te hace atractiva es tu cerebro y lo importante es el interior, y todo el mundo le da al me gusta y aplaude complacido. Sí, claro.

Cuando la puta realidad es que no salimos de casa sin tapaojeras, nos alisamos el pelo y cuando nos compramos unos vaqueros nuevos es más importante que nos hagan buen culo que qué se hayan fabricado en Bangladesh. Y ojo, hablo de cosas al alcance de cualquiera (en el primer mundo), no estoy entrando en procedimientos más caros e invasivos como liftings, aumentos de pecho o inyectarse cosas en las arrugas.

Pero eso si, apoyamos efusivamente todo intento de promoción o defensa de una imagen de mujer «imperfecta», «real» o como lo queráis llamar. Muy coherente todo. Olé nosotros, también.

Además, usamos filtros cuando subimos fotos a redes sociales y nos ponemos imágenes irreconocibles de perfil. Que vale, la mayoría no se quita medio muslo y se pone una talla 100 de pecho teniendo una 85, pero más que nada porque no sabe, que si no, al tiempo.

Entonces ¿nos encantan las mujeres «al natural» mientras no seamos nosotras? ¿o como va el tema? ¿que se naturalicen otras, pero a mi dame unos tacones que me amarguen la noche pero mira como estilizan? ¿que muestren ellas la edad que tienen pero a mi tíñeme las canas? Y quien no lo haga, que tire la primera piedra. 

Reflexiones como estás las he estado leyendo a lo largo del día, y asumamos que no les falta razón. 

Ilustración de Sara Herranz, muy optimista

O igual, no sé, igual tenemos el problema en otro lado. Igual resulta que tenemos una sociedad tan jodidamente pervertida en este sentido que prácticamente imposibilita una socialización normal a una mujer sin asumir como inevitables esas cosas. Que simplemente nos facilitamos la vida, que tenemos demasiados frentes abiertos como para hacer una lucha de no ir con tacones a una boda (por decir algo) o el día a día ya nos es bastante duro como para además sentirnos mal por llevar el pelo hecho un cristo y nos simplifica la interacción social el ir mona. 

Porque sí, ir mona facilita la vida, eso es así. La vida es más fácil si pesas 55kg que si pesas 110, y no hablo de salud. La vida es más fácil si no te alejas muchísimo de los cánones, por eso es injusto pedirnos que no nos esforcemos por encajar en el canon, porque resulta que encajar en el canon tiene premio. Y queremos el premio. Y ser inteligente, o solidaria, o coherente, o culta, o bella por dentro o ingeniera de caminos, no puntúa.

Que igual estamos pidiendo demasiado cuando queremos que una adolescente (o una treintañera) aspire a ser «real», en lugar de guapa y delgada, porque prácticamente todos los modelos de mujer con éxito que lleva viendo desde que nació son guapas y delgadas. Empezando por sus muñecas. Que igual lo que necesitamos es un cambio de paradigma social radical desde la base, y no desayunar con tazas de Mr Wondeful. Digo.

Que yo tampoco sé como salir de aquí, estoy igual de atrapada, aunque me guste pensar que al menos, soy consciente de ello. 

¿Es un paso acabar con el photoshop? sin duda, y no pequeño. Igual que nos quejamos de como la industria alimentaria y su publicidad pervierten el concepto de dieta saludable y luchamos contra ello sin cuartel, no podemos negar que también se está vendiendo un canon de belleza imposible que está minando la autoestima de medio mundo y despistando mucho el mensaje sobre el verdadero valor de las personas. 

Pero hay que reconocer que apuntamos el tiro siempre a donde menos duele. Que aplaudimos a Inma por su gesto (y yo te aplaudo, Inma) pero criticamos a la chica de al lado que va sin depilar o descartamos directamente como atractiva a la que se sale mucho del cánon, sin tener ni idea de como de interesante es su interior. Y mientras, protestamos por el photoshop y porque no haya maniquíes de la talla 40. 

Pues bueno, oye, menos da una piedra, cualquier pataleo es bienvenido, cualquier queja descafeinada es necesaria. Pero necesitamos más enfurecimiento como diría mi amiga Virginia y necesitamos destruir porque aquí puede que no haya nada que salvar, que diría Marc

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16 comentarios

  1. Por no hablar del cine. El cine, qué tanto nos gusta también está bajo retoque, o creen que Drew Barrymore en los ángeles de Charlie con sobrepeso en el rodaje "casaba" con sus compañeras, delgadísimas ellas?, pues se le rebajó peso, y ese impacto llega más allá de lo que pueda llegar una foto, lo ven en cines de todo el Mundo y después en DVD, y televisión, etc… y también en edades tempranas, no entraré en las películas Disney. Otro mundillo bajo retoque, el publicitario, y visto con mis ojos, con un programa que no se llamaba Photoshop si no que tiene un nombre más bien infernal, se retoca fotograma por fotograma, y la modelo del anuncio de una conocidísima marca de moda, dejó de tener granitos (por qué ellas también los tienen), y cara redonda y pasó a tener una carita de ángel y lisa, y sí, apto para todos los públicos, fue la nueva campaña de otoño de ese año y salió en todas las televisiones. Se hace con todos los anuncios que vemos en la tele.- palabras del editor.
    Yo uso Photoshop, me gusta y no dejaré de usarlo por ser el "diablo" de los cánones de belleza, y no contaré las veces que me han dicho, oh! sabes usar Photoshop?? pues haz que salga más delgada en las fotos, quítame arrugas, qué salga guapa!!!!
    Yo también te aplaudo Inma, pero antes de vender la imagen, no es mejor firmar un contrato previo sobre cómo quieres que te vean el público de la revista? no es mejor hablar antes con el director de arte de la revista para que hable con sus fotógrafos?
    En el programa de El hormiguero, durante ediciones pasadas, las hormigas se "metían" con AR por qué después de muchas ediciones Ana Rosa siempre salía perfecta en la portada, por ella no pasaban los años, incluso mentaban a Photoshop, en un programa que ella estaba de invitada, dijo: nooo, no usamos Photoshop!!!….
    En fin! creo que necesitamos ser "más reales" incluso con este tema.
    Besos

  2. Yo creo que también tiene que ver con la alimentación. El peso ideal, los cánones de belleza, cuidarse. A ver: en teoría, si haces deporte, comes bien y etc. vas a estar delgada. Y las que queremos bajar peso, decimos que es por salud. Pero en realidad, tampoco es por salud: es por lo que tú dices: porque delgada y mona, las cosas son más fáciles. Porque es cierto que son más fáciles.

    Igualar el tono de piel y eliminar imperfecciones sí se hace en todos los casos. Tanto a ellos como a ellas. Lo que no sé es si a los modelos masculinos se les retoca tanto como a las mujeres. El resto de las cosas ya te las ha dicho Catypol, con la que estoy de acuerdo en absolutamente todo.

    Yo parto de la base de que el exterior es lo que primero se ve. No, no es cierto que reivindiquemos a las mujeres reales. En realidad, todas tenemos un cerebro de tía buena, pero la naturaleza (o nuestros hábitos) no nos han dotado de un físico acorde con esa parte de nuestro intelecto. No estoy diciendo que todas las mujeres sean unas acomplejadas, pero sí que todas se quejan de algo. De su pelo encrespado, de sus cartucheras, de sus tetas, de su barriga o de sus pelos. Si hay alguna impresionantemente guapa en el grupo, se la mira con reservas (si no la conoces, me refiero). Esto ocurre, generalmente.

    Creo que tenemos el deseo de lo que querríamos hacer. No estar tan presionadas, vivir más tranquilas, sin tanto metido en la cabeza. Yo salgo siempre sin pintar. Pero siempre oigo que pintada estoy más mona.

    Tampoco veo nada malo en estar mona, ojo. Ni en pintarse. Lo que veo mal es que sea una cosa impuesta. Por ejemplo, yo me depilo (de ciento en viento y las ingles creo que me las depilo una vez al año, si acaso). Me encantaría no depilarme. Me parece una tortura y además tengo problemas de circulación por la colitis ulcerosa. Pues bien: mi mente no me deja. Eso es lo que veo perverso. Que tu mente no te deje. Desde que tengo a los gatos en casa, es mejor porque me depilo con cuchilla de tarde en tarde y cuando no tengo arañazos. Sí, tengo arañazos en las piernas. Y postillas. Pero no me molestan. Si le molestan a alguien, que no mire. O que se vista y se vaya a su casa, ya me encargaré de echarle yo.

    No podemos ser coherentes cuando luchamos con planteamientos inconscientes, creo. Por eso compartimos. Porque decimos: nos gustaría ser así (no depilarnos, no maquillarnos, no preocuparnos por el antebrazo colgando). Pero no lo somos. Nos lo han grabado a fuego.

    Y, para las mujeres, lo más importante es ser guapas. Es una mierda, pero es lo que se valora. A una ingeniera no se la valora. Se valora la belleza en las mujeres y el cerebro en los hombres. Ya está.

    1. Lo de la depilación en las mujeres es lo más obtuso que ha sufrido el maldito ser humano y lo bueno es que ni saldrá en ningún libro de historia / sociología ni será debatido ni tan siquiera expuesto. Como dices, "tu mente no te deja ni plantearte esa situación". Hablaba con Lucía que lo mismo con el salir vestido de casa. Ir desnudo es un atentado contra todo lo establecido, el ejemplo inesquivable de libertinaje el cual desde niños hasta ancianos lo confirman por simple exposición (todo lo que ven va vestido, pocos o casi nadie han visto sin ropa y a la que sucede el estigma se crea de forma espontánea).

      Te lo dice alguien que por decisión propia (desconociendo si influido poco o mucho por la sociedad, queda como duda eterna) se hace todo el tronco superior a láser médico, pero esa obsesión global por la depilación femenina y el insulto sin racionalizar de cualquier mejor con más de 5 nanómetros de vello es enfermizo. Una clara situación donde un comportamiento el cual nadie sale ganando beneficia a empresas y negocios relacionados con la estética o que venden productos al uso. No todas las acciones o campañas tienen detrás a grandes corporaciones o vienen de la mano de teorías conspiranoicas. Esta misma la hemos creado nosotros (cooptada por diferentes sectores, pero aquí nadie cobra un % de las ganancias de este mercado por hacer cara de asco cuando una mujer no tiene la axila como la porcelana).

      Siendo injusto con la analogía, estas cosas me recuerdan a personas que por psoriasis o problemas dermatológicos tienen mucho acné o la piel de la cabeza se les pela. Un compañero me contó que sufrió bastante en su etapa adolescente porque eso mimetiza mucho el efecto de tener caspa, y decía que se podía concienciar a la gente sobre la obesidad infantil u otras cuestiones, pero el tema caspa era algo muy estigmatizado. Realmente parece que existan temas (sea por sesgo de género, machismo inherente y recalcitrante o por ser intocables) donde el debate no puede realizarse porque la simple mención es atacada.

      Yo repetiré a cada segundo que tenemos que forzar un cambio. Como dije en twitter, no me vale el "cuando la sociedad cambie podremos plantearnos contextos idílicos". No, cuando la sociedad uno la ve como "enferma" hace lo posible para curarla. Como mínimo, alertara de su falta de salud.

      Saludos.

  3. Muy buen artículo Lucía! Tienes mucha razón. Nos gusta vernos monas y cuántos más años más monas queremos vernos. La moda del photoshop nos ha ido cambiando en nuestras mentes el concepto de belleza, ahora hay que ser perfecta!! El bisturí ayuda, pero sin el photoshop no somos nada!!! Me remito a fotos de famosas en reportajes concertados y cuando las pillan desprevenidas, no tienen nada que ver.
    Me parece una escalada de "perfeccionismo" inútil, porque es irreal.
    La sociedad somos todos y la manera de cambiarla es con gestos como el de Inma.

  4. Una cosa es querer verte mona dentro de tus posibilidades y otra engañar con técnicas que se alejan de la realidad. Ponerte maquillaje para tapar marcas de granos es posible en la realidad, pero hacerte un photoshop para quitarte el michelín no.
    Sí, el mundo es superficial en general, y quién sabe por qué. ¿La publicidad y los medios influyen en la sociedad o precisamente por cómo es la sociedad los medios actúan así? Seguramente haya un poco de ambas cosas, y es cierto que los medios no harán algo que no sepan que vende. Y la belleza vende.
    Estoy totalmente de acuerdo con que se exige naturalidad pero luego se insulta y se hacen burlas a personas por su físico. Es muy hipócrita.
    Creo que se ha llevado muy lejos la manipulación del físico, y no es justificable porque el mundo sea superficial. Que nos maquillemos, nos depilemos o nos planchemos el pelo no justifica crear algo irreal, porque a este paso no necesitaremos modelos: que creen a las personas virtualmente y se acabó!
    Es cierto que queremos vernos bien, pero sin perder la cordura y evitando obsesiones y la esclavitud que supone la belleza que "nos piden". Yo trato de cuidarme para no necesitar ni maquillaje, ni planchas, ni prendas que me escondan. Trato de que mi piel y mi pelo estén sanos, trato de comer sano y hacer algo de ejercicio para estar saludable tanto por dentro como por fuera. Trato de desprenderme de dependencias absurdas que me disfracen de algo que no soy. Y creo que no es una idea descabellada, debería practicarse más y seríamos más felices.
    Olvidad las modas, las pasarelas, las revistas, etc. Vivid al margen de eso. Que os sea indiferente. A mí me lo es, y no soy consciente de la cantidad de anuncios y carteles que hay a mi alrededor; de verdad, no me percato. Porque no me importa. Me importa mi felicidad.

  5. La imagen es muy importante socialmente y yo creo que el problema no es que cada uno de nosotros quiera lucir lo mejor posible, ya que eso te hace sentirte bien y es indicativo de una autoestima adecuada. El problema viene cuando el ideal de belleza es único y no se diversifica, eres bella únicamente si eres extremadamente delgada, pero si tienes caderas, o poco pecho, o tienes estrías, ya no eres bella. El cánon de belleza es muy estrecho y ni siquiera Inma Cuesta, una mujer físicamente atractiva, entra en él. Tenernos tan pendientes de nuestras imperfecciones a través de las comparaciones qeu hacemos la mayoría de nosotros con las bellezas de photoshop es algo que le viene genial a las industrias que nos venden las cremas anticelulíticas, las fajas, las cremas antiarrugas y la depilación láser. No les interesa que nos queramos, que nos miremos al espejo y nos gustemos, que nos veamos genial con tripa.

  6. Hola,
    Me ha ido gustando tu artículo hasta que he leído este párrafo:
    “Porque sí, ir mona facilita la vida, eso es así. La vida es más fácil si pesas 55kg que si pesas 110, y no hablo de salud. La vida es más fácil si no te alejas muchísimo de los cánones, por eso es injusto pedirnos que no nos esforcemos por encajar en el canon, porque resulta que encajar en el canon tiene premio. Y queremos el premio. Y ser inteligente, o solidaria, o coherente, o culta, o bella por dentro o ingeniera de caminos, no puntúa.”

    Yo soy ingeniera aeronáutica, muy mona y estilosa según opiniones de mi entorno, peso 53kg y mido 1,65m. Aunque llevo una dieta saludable, soy delgada por naturaleza. Este párrafo que has escrito sólo puede calificarse como machista, ya que presupones en él que una chica mona y delgada no puede ser a su vez inteligente, culta o ingeniera de caminos (en mi caso aeronáutica). Te recomiendo que te informes sobre la campaña ILookLikeAnEngineer para que la próximas vez no escribas cosas como esta. A mí nadie me ha regalado nada por ser delgada o mona, todo lo que he conseguido ha sido a base de esfuerzo, trabajo duro y aguantar comentarios machistas (del mismo calibre que tu artículo) como “a ti te pegaba haber estudiado ADE” qué tontería es esa? Por qué no me pega haber estudiado ingeniería? Es igual de fuerte que a una mujer le digan esos comentarios que el que a una chica “gordita” no le cojan en un trabajo por su aspecto físico. Lo que pasa que el problema de fondo no es cuestión del aspecto físico de las mujeres, sino del mundo occidental todavía muy machista en el que vivimos. Para terminar, me molesta mucho que se diga que una mujer “real” es una mujer que tenga una talla 40. Yo no tengo una talla 40 (ni mi madre, ni mis tías, ni mis primas…) y soy igual de real que tú o cualquier otra mujer.

  7. A mi este post me llega a lo más hondo. Por muchas cosas vividas. Una de las primeras que recuerdo es cuando con tan solo 6 años me llevaron al cine a ver La sirenita. Desde que tengo uso de razón soy gordita. Pues bien, allí estaba Úrsula convenciendo a Ariel para darle piernas a cambio de su voz. Y para ello le canta una canción en la que, a parte de decir algo así como que a los hombres no les gustas si les hablas, a no ser que los quieras aburrir (o sea no importa nada como seas por dentro, lo importante es lo de fuera), también decía "ella quiere ser delgada (y se ve una sirena gorda) y el quiere una pareja, ¿quien los ayudó? Fui yo" (y entonces ella se vuelve por arte de magia delgada y él se enamora de ella y la abraza). Recuerdo mi sensación de angustia al saber que yo era una niña gorda, y por ello no tendría derecho al amor, a sentirme bien, ni a nada. Y eso no solo era algo que estaba en mi cabeza, sino también en la de mis compañeros de clase que me lo hacían saber cada dos por tres (se ve que a ellos también les metieron esas ideas sobre el aspecto físico en la cabeza). Y sí, lo repito, tenía 6 años. Casi ná pal cuerpo. Con esa edad y ya sientes que no vales nada. Y según creces la cosa va a peor porque te han crecido demasiado los pechos y cuando alguien te dice algo por la calle sientes que tú tienes la culpa, o porque la parte más fea de tu cuerpo son las cartucheras y tu madre te dice que te pagará una operación cuando seas mayor en lugar de intentar transmitirte un estilo de vida saludable y sin tanto sufrimiento como el de las dietas restrictivas que no paras de hacer desde los 9 años de edad y que no acaban de dar resultado porque ves que en casa se meriendan donuts y a ti te toca comerte una pera y ya no aguantas más así.

    A día de hoy he trabajado mucho para quitarme muchas cosas de la cabeza, y lo he conseguido, además aunque en mi niñez no tuve mucha suerte, en mi adolescencia y juventud sí que encontré a personas encantadoras, y chicas preciosas por dentro y por fuera a las que les daba igual salir a la calle sin estar maquilladas, depiladas o vestidas a la moda. A habido de todo, claro, pero tengo suerte de haber coincidido con personas muy auténticas a las que realmente lo que les importaba eran las cosas importantes, vivir con mayúsculas y que poco a poco me hicieron ver que la vida no era tan negra como la veía en mi infancia (aparte de que soy una persona muy positiva que sabe que siempre después de una caída hay que levantarse y que a pesar de todo me es fácil progresar hacia lo bueno siempre). Te daban amor y te querian como eras, así que no debías de ser tan mala. El mundo no está hecho para sufrir.

  8. Pero siempre te queda algo ahí. Algo que está en lo más hondo de ti. Y no usas photoshop, ni siquiera sabes ponerle un filtro a una foto porque no te interesa mucho la tecnología, así que las subes al facebook tal cual. Sueles salir de casa sin maquillar, y lo de la depilación te da un poco igual (la verdad tengo poco pelo pero no me importa enseñarlo). No sueles usar tacones porque no estás comoda y los dejas para ocasiones muy especiales. Y ya sabes cuidarte, has perdido mucho peso y te ves bien. Eres muy femenina y una chica con curvas, como Marylin, que tanto te gusta. No te importa no ser perfecta, eres de verdad y te quieres como eres, con tus pecas del sol, con tus dientes no del todo blancos, con tu metro cuarenta y siete de estatura y tu aspecto un poco rechonchillo a pesar de estar en un peso saludable. Pero siempre sigue ahí la sombra, en lo más hondo de ti. La sombra de que no vales del todo porque no eres como las chicas que salen en la tele. Y te compras un bañador tipo culotte para la sauna del gimnasio porque disimula tus cartucheras. Y retrasas la búsqueda de un embarazo que estás deseando tener porque aún no te has machacado lo suficiente en el gimnasio como para tener esas piernas perfectas, y te da miedo que tu cuerpo cambie demasiado tras un embarazo…

    Y digo yo, si mi gata Lupita es perfecta, tal y como es (y eso me pasa con todos los animales, todos son preciosos tal y como nacen) ¿por qué a los seres humanos no nos pasa lo mismo? ¿Por qué tenemos que tener determinados rasgos, determinado peso, determinada altura para ser considerados bellos? ¿No será que no sabemos ver? ¿Que tenemos los ojos atrofiados y no vemos con pureza la belleza de los demás ni la de nosotros mismos? Me da a mi que sí, que nos complicamos la vida, con lo corta que es y lo bonita que puede llegar a ser. Y yo antes atacaba a las chicas delgadas, pero ya no, son igual de bonitas que las gorditas, que las rubias, las castañas o las morenas. Todos somos especiales. Todos somos bonitos. Y además, ser bonitos no debería ser lo más importante, es una mierda que nos hayan metido eso en la cabeza, pufff, que porquería. Ahora para mi lo importante respecto al físico es ser saludable, peses más o menos, aunque aún queden cosas divagando por ahí que salgan de tu cabeza los días malos.

    Gracias por el post, Lucía, hacía falta ya un post como este. Ojalá todos seamos conscientes de estas cosas y trabajemos para mejorarlas. Si tengo una niña jamás le diré cosas feas sobre su cuerpo. Sea como sea. La ayudaré a crecer feliz, a vivir, que es lo importante. Y vivir saludable, sin obsesiones con el cuerpo, y teniendo claro que nos gusta vernos bien, pero que lo importante está dentro. Que nadie tiene que crecer pensando que no vale nada por su aspecto físico. Que una día estamos aquí y al siguiente puede que ya no estemos, por eso hay que vivir con positividad pensando lo mejor de nosotros mismos. Queriendonos, amandonos, y con autoestima. Que hay mucho que aportar al mundo, y para eso estamos aquí, no solo para ser una cara bonita.

    Un abrazo fuerte Lucía!!

  9. Muchas gracias a todos por vuestros comentarios, lo cierto es que vale más que el post en sí. De verdad, me siento afortunada por tener lectores como vosotros.

  10. Me parece estupendo el artículo pero no me identifico en absoluto con él , no soy hipócrita, me parecen estupendas las mujeres que no se tiñen, que no se ponen tacones y que tienen los santos c…….. de no amoldarse a las miles de condicionamientos físicos que se han establecido para las mujeres. De hecho, yo soy una de ellas , no me tiño las canas, no me plancho el pelo, llevo gafas , mis cejas son tupidas, etc etc. Al que le guste bien y al que no ,aire. Mi trabajo nunca ha dependido de mi aspecto y mi aspecto es el que es porque yo paso de depender de peluquera, depiladora etc y no quiero amoldarme a este machismo tan horroroso,copiado por las mismas mujeres siempre prestas a criticar a la de al lado por su aspecto físico. No es tan difícil la vida sin estirarse el pelo, os lo aseguro. Probar!

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